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miércoles, 22 de enero de 2014

Linguoland

"En el mundo de los denominados simuladores de entornos virtuales en 3D, presentes cada vez más en el aula (y en la formación en competencia digital del profesorado), y después del hito que supuso Second Life, y otras iniciativas como Opensimulator, Edusim y OSgrid, aparece la plataforma Linguo Land, concebida específicamente para la didáctica y aprendizaje de lenguas, desarrollada por la empresa con sede central en Oviedo Virtway (Indigo Group) y en la que colaboran, entre otros socios y en cuanto al ámbito educativo, las Universidades de Oviedo y Stanford (EE.UU).

El acceso es sumamente sencillo, a partir de la página web  http://us.virtway.com (para PC) y en el caso del iPad, (http://us.virtway.com/ios.html), pero en este caso previamente ha instalarse la App de LinguoLand.

Tras instalar una pequeña extensión (nada que ver, desde luego, con la complejidad de Opensimulator, por ejemplo) y comprobar los requisitos del sistema (se recomienda un sistema y tarjeta gráfica actualizados), nos encontramos con una interfaz intuitiva (y, como es costumbre decir ahora, amigable). Existen dos posibilidades, el registro o simplemente el acceso como invitado para una somera aproximación. Como es habitual en estos sistemas, primero hay que seleccionar un avatar, de entre los cerca de 39 disponibles, y un Nick, y ya tenemos configurada nuestra identidad virtual. No hay muchos menús que compliquen la navegación, en la que, por defecto, aparece el Campus Linguoland, con un vídeo que aporta una breve explicación del uso de la plataforma. Los otros espacios disponibles son la Sala de Proyecciones y el Aula virtual (y próximamente, una cancha de baloncesto). Se trata de crear situaciones comunicativas reales, no estructuralistas, como defiende desde hace ya tiempo, aunque con resultados desiguales, la didáctica de segundas lenguas.

En la parte superior derecha, se encuentra el escenario; abajo a la izquierda, contamos con 6 puntos de inicio, que sirven de teletransporte e información (multimedia, en su caso), unos y otros se irán ampliando progresivamente, para conseguir interacciones con el mayor número posible de usuarios mediante chat escrito o hablado, con. Frente a lo sucedido en las experiencias llevadas a cabo por Second Life, la familiarización con el sistema para profesor y estudiantes en este sentido no resulta complicada.

Por el momento todavía en beta pero en continua actualización, Linguoland aspira a consolidarse en centros universitarios, escuelas y colegios, además del acceso de usuario individual. Cuenta a su favor con el soporte multiplataforma: estará disponible pronto para Android (ya es posible par iPhone y I-Pad), lo que la convertirá en pionera en su campo (Second Life solo es compatible con Windows; los demás entornos citados, todo lo más, alcanzan también a Mac y Linux). Perfectamente diseñado para llevar a cabo clases en línea, debates o ponencias, bien monolingüísticos o bien pensados como actividades tándem, se enfrenta, eso sí, a los retos de su consolidación en los centros (que, sucesivamente, aparecerán, como nuevos espacios comunicativos virtuales) y a su empleo para la evaluación del alumnado, si bien es cierto, respecto a esto último, que las propuestas formuladas, a menudo mediante rúbricas, para el uso de herramientas TIC a priori “difíciles” como Twitter ganan en solidez (al respecto, Linguo Land permitirá muy pronto guardar las conversaciones, sean estas de voz o textuales). En suma, estamos ante una herramienta con grandes posibilidades didácticas para motivar el aprendizaje informal, colaborativo y “real”, mucho más allá de las estrechas paredes del aula". (Adaptado de http://www.techpuntocero.com/linguoland/)

Registro como invitados para acceder al Aula Virtual y Campus.

Documentos de instalación y ayuda: https://www.dropbox.com/sh/q1mzl68prz2w3ie/EpXZtsgVNe
Elegir destino y seleccionar avatar
Opciones: mejor mantener las predeterminadas.

Dentro de LinguoLand se cuenta con 2 escenarios. Un Aula donde los alumnos podrán sentarse a escuchar la presentación (modo ponencia) y una sala de reuniones donde habrá varias pantallas y una mesa de reuniones que fomentará el debate y la participación.
Mejor rendimiento: a distancia, evidentemente (ubicuidad).
Se pueden subir presentaciones, vídeos y cualquier tipo de documentos.
Quizá al principio cueste manejar el entorno. Se trata, además, de un espacio recién creado. Menos ansiedad del estudiante. (Cfr. Melchor 2011)

Ventajas:
Superar limitaciones del aula de ELE, como la distancia geográfica. Los alumnos pueden grabar un audioresumen en la lengua extranjera en el que explicaran cómo se había desarrollado la
sesión con su compañero/a, de qué habían hablado y si se había producido algún
problema técnico.

Foro de debate: ¿Cuáles son vuestras propuestas? ¿Tareas posibles para ejercitar la expresión oral y escrita?.




Un nuevo entorno virtual en didáctica de lenguas: Linguoland
En el cada vez mayor impulso de los simuladores de entornos virtuales 3D, presentes cada vez en el aula y por tanto en la formación digital de profesores, y después del hito que supuso la introducción de Second Life, y otras iniciativas como Opensimulator, Edusim y OSgrid, aparece la plataforma Linguoland (@Linguoland), concebida específicamente para la didáctica y aprendizaje de lenguas, desarrollada por la empresa ovetense Indigo Group (Virtway.com) y en la que participan instituciones de la relevancia de la Universidad de Stanford.



Mi avatar en Linguoland
El acceso es intuitivo, a partir de la web http://linguoland.virtway.com. Tras instalar una pequeña extensión (nada que ver, desde luego, con la complejidad de un Opensimulator, por ejemplo) y comprobar los requisitos del sistema (se recomienda un soporte y sistemas operativos actualizados, sobre todo en gráficos y memoria RAM), nos encontramos con una interfaz intuitiva y, como es costumbre decir ahora, amigable. Hay dos posibilidades, el registro o simplemente el acceso como invitado. Como es habitual en este tipo de sistemas, primero hay que seleccionar un avatar, de entre los 42 disponibles, y un Nick, y ya tenemos configurada nuestra identidad virtual. No hay muchos menús que compliquen la navegación, en la que, por defecto, aparece el Campus Linguoland, con un vídeo que aporta una breve explicación del uso de la plataforma. Los otros espacios disponibles son la Sala de proyecciones y el Aula virtual (y próximamente, una cancha de baloncesto). Se trata de crear situaciones comunicativas reales, como defiende la didáctica de lenguas actual.
En la parte superior derecha, se encuentra escenario; abajo a la izquierda, contamos con 6 puntos de inicio, que sirven de teletransporte e información (multimedia), unos y otros se irán ampliando progresivamente, para conseguir el objetivo principal: la interacción comunicativa con el mayor número posible de usuarios, bien por chat o mediante micrófono, convenientemente configurado. Por tanto, la familiarización con el sistema para profesor y estudiantes no resulta complicada, frente a lo que sucede en las experiencias llevadas a cabo por Second Life.

Por el momento, Linguoland busca consolidarse en centros universitarios o escuelas. Cuenta a su favor con el soporte multiplataforma: estará disponible pronto para Android e I-Phone. Perfectamente diseñado para intercambios no solo unidireccionales, sino para actividades del tipo tándem, se enfrenta al reto de su consolidación en el aula y empleo para la evaluación del alumnado, si bien es cierto, respecto a esto último, que las propuestas formuladas, a menudo mediante rúbricas, para el uso de herramientas TIC como Twitter son cada vez más sólidas (Linguoland permitirá pronto registrar voz y texto). En suma, una herramienta con muchas posibilidades didácticas para motivar el aprendizaje informal.

Mi contacto con la plataforma Linguoland se remonta prácticamente a su nacimiento. Tuve noticia a través de internet, y en seguida me planteé que la conocieran mis alumnos del Máster de Español como segunda lengua y otras lenguas modernas de la Universidad de Sevilla, y así lo hice este curso académico 2013-2014 (quiero agradecer personalmente, una vez más, a Ignacio Dieste Velázquez habernos creado un espacio propio en la plataforma para la Universidad de Sevilla). Teniendo siempre presente que una herramienta de este tipo merece una reflexión profunda para su adecuada introducción en el aula, los estudiantes pudieron conocer algunas de las posibilidades que ofrece. Evidentemente, como profesor de una asignatura sobre aplicación de las TIC en el aula, me parecía imprescindible que los alumnos conocieran este entorno virtual, de cara también a si se plantean incorporarlas a sus futuras clases como profesores. A partir de una breve presentación, dentro de la sala de reuniones virtual, sobre recursos disponibles en línea para la enseñanza de español como lengua extranjera, les mostré Linguoland, que yo entiendo como un entorno virtual en 3D con estética de videojuego. Alumnos y profesor, o mejor, nuestros alter ego y avatares, planteamos sobre todo posibles aplicaciones al aula de ELE, del tipo de gymkhana, “pilla a pilla”, intercambios tándem, evaluación final a través de una tarea o juego de personajes (“role play”), procurando aportar dinamismo y enfoque lúdico, pero sin olvidar nunca el propósito didáctico.
Debido a la recentísima creación de la plataforma, nuestra aproximación a Linguoland aún no ha abordado el diseño de actividades concretas y su reflexión, objetivo que perseguimos en la próxima edición del Máster. En cualquier caso, debo decir que, pese a los iniciales problemas técnicos (firewall, configuración del sonido), solucionados sin mayores dificultades, la valoración de los alumnos fue muy positiva. Linguoland les resultó una propuesta sugerente, de la que destacaron su carácter multiplataforma, su accesibilidad, su capacidad reductora del filtro afectivo, las posibilidades de trabajo colaborativo y su concepción más intuitiva que otras plataformas como Second Life, y con una especialización mayor para la enseñanza de lenguas.

Recomiendo, por supuesto, a otros profesores incluir esta herramienta en el aula de idiomas. Sin ninguna duda, al menos que tengan la opción de utilizarla, y que contrasten pareceres y resultados de manera crítica con sus futuros alumnos.